Santa Rosa, una localidad con una rica historia, fue fundada en 1764 por el misionero jesuita Gabriel Díaz, en colaboración con Esteban Arroyo y los indígenas de la nación chiriguana. Este acontecimiento tuvo lugar tres años antes de la expulsión de los misioneros de la Compañía de Jesús de la región. La fundación de Santa Rosa se llevó a cabo en tierras que formaban parte de una de las estancias de la misión de los Santos Desposorios de Buena Vista, dependiente de la región de Moxos. Los misioneros jesuitas desempeñaron un papel fundamental en el establecimiento de estas comunidades y en la difusión del cristianismo entre las poblaciones indígenas. A pesar de la posterior expulsión de los jesuitas, el legado de su trabajo perduró en la fundación de Santa Rosa. La presencia de Esteban Arroyo y los indígenas chiriguanos en este proceso refleja la colaboración y la influencia de las diferentes comunidades en la conformación de la localidad. Más tarde, el 8 de abril de 1926, durante el gobierno de Hernando Siles, se creó el municipio de Santa Rosa mediante una ley. Este paso significativo reconoció la importancia de la localidad y proporcionó una estructura administrativa para su desarrollo y gobierno local. La fundación de Santa Rosa y su posterior creación como municipio son hitos clave en su historia. Estos eventos representan el esfuerzo de los misioneros jesuitas, la colaboración entre diferentes grupos y el reconocimiento oficial de la importancia de la localidad como centro de vida y desarrollo comunitario.

Bibliografía: Romero, René. Historia de Santa Cruz. Plural Editores, 2010.

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